Marcelo, platícanos de tu personaje en La fuerza del destino...
"Antolín Galván es un rufián de pueblo. Él es el detonante de algo que obliga al protagonista a realizar un viaje y modifica la historia, y así se la pasa durante toda la trama, provocando situaciones. Es un gran proyecto para los actores, porque son pocos personajes y todos tienen su momento".
Hay chavas muy guapas como Sandra Echeverría, que anda soltera. ¿Te gustaría enamorarte de alguna de ellas?
"No lo descarto. No estoy cerrado a eso como muchos compañeros, y puede llegar a suceder. ¿Por qué no?".
¿Quién de tus compañeras te gusta?
"Todas ellas son muy bellas: Sandra Echeverría, Laisha Wilkins, Yuliana Peniche, Roxana Rojo de la Vega...Hay muchas y con todas me llevo bastante bien, pero con ninguna hay algo especial todavía".
Hace tiempo se te relacionó con Lucero...
"Es parte del negocio. Lo tomo como algo que pasa en el ambiente en que nos movemos".
En su momento, dijiste que eran amigos y que no podías pensar en algo porque ella estaba casada. ¿Y ahora?
"Ahora sí que por la fuerza del destino y por situaciones de trabajo de ambos, le he perdido mucho la pista y no he tenido oportunidad de verla. Sé que basta sólo un mensaje y una llamada para reanudar el vínculo, pero precisamente por el momento que ella vive, preferiría que transcurra eso y luego sí hablarle, porque me encantaría tener una relación con ella".
Declaraste que Lucero es una mujer de la que cualquier hombre se puede enamorar, ¿por qué?
"Exacto, a cualquier hombre le agradaría tener una relación con ella porque es un ser humano divino, que tiene mucha luz y es una gran persona".
¿Qué es lo que más te atrae de ella?
"Tiene un rostro divino, una sonrisa preciosa, un ángel impresionante y, además de lo físico que es muy bello, lo más importante es lo que guarda en su corazón. Tiene gran sentido del humor y es muy inteligente, que son cualidades valiosas, además de que todo le sale bien: como actriz, cantante y conductora es maravillosa".
Por otro lado, ¿por qué decidiste ser actor después de tener dos carreras: técnico constructor y profesorado de inglés?
"Por amor al arte. Ya estaba haciendo cosas de actor en Argentina y tenía temporadas en que me iba bien y otras mal, pero yo deseaba algo más".
¿Qué ha sido lo más difícil de vivir en otro país?
"Lo que más me ha pegado es la soledad, estar en una ciudad extraña, eso fue lo más duro que recuerdo. Ahora extraño a mi padre, hermano, familia y amigos, pero ya estoy muy hecho a la forma de aquí y considero a México como mi país".
¿Cómo te cuidas físicamente?
"Me meto al gimnasio, corro, y cuando empiezo un proyecto, cuido mucho la alimentación. También hago una dieta con un nutriólogo, porque es la mejor manera de no pasar hambres, porque si uno lo hace por su cuenta, no tienes las medidas de lo que debes consumir".
¿Cómo andas en el amor?
"Ya sabes que siempre hay amigas, porque este es un trabajo que absorbe mucho".
¿De repente no sientes la espinita de casarte y tener hijos?
"Claro, yo creo que a todos les da esa sensación, pero hay que ver con quién".
¿Qué es lo que más te llama la atención de una mujer?
"Como buen argentino, unas buenas pompas y una figura que en general sea armónica".
¿Qué es lo que más te gusta de ti?
"No me gusto mucho. Uno se critica y yo lo hago bastante, pero una cualidad que tengo es la tenacidad. Lo que no me agrada de mí es que soy un poco gruñón, sin embargo he mejorado mucho y afortunadamente nunca he tenido problemas por eso en mi trabajo".
Te ves muy apasionado, ¿así eres en la intimidad?
"Sí, incluso yo creo que ya cumplí todas mis fantasías sexuales, como hacer el amor en una terraza, en una playa, en el bosque, etcétera. No soy un gran aventurero, pero todos hemos tenido estos encuentros".
¿En un avión?
"No, eso no y menos ahora, porque te captan los paparazzi y te meten preso. Lo mejor es esperar a aterrizar".
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